Heridas emocionales. Depresión. Ansiedad.

Las situaciones problemáticas y dolorosas que vivimos en la infancia pueden dejar heridas emocionales que influyan en nuestra vida de adultos. En el artículo anterior explicaba cuáles son las 5 heridas emocionales de la infancia que nos condicionan a lo largo de la vida, cómo identificarlas y cómo sanarlas. En este artículo os escribo sobre cómo afectan las heridas emocionales a la salud si no las sanamos y las dejamos que perduren en nuestro interior.

Cuando los aprendizajes de la infancia son dolorosos se va formando una parte de la personalidad basándose en creencias negativas hacia nosotros mismos. Si se mantienen estas creencias en la vida adulta pueden ser causa de sufrimiento y bloqueos.

Las emociones y nuestra salud física, mental y emocional están estrechamente unidas de manera que si mantenemos las heridas emocionales que nos han causado un trauma emocional nuestra salud se verá afectada y con el tiempo podrán causar enfermedades físicas y/o mentales.

Heridas emocionales

Heridas emocionales y daños en la salud

Mantener el dolor de las experiencias dolorosas vividas altera el funcionamiento de nuestro organismo afectando a la salud de nuestro cuerpo y a nuestra salud mental y emocional.

Hay tres emociones desagradables que producen una alta activación fisiológica influyendo en la salud. Estas emociones son la ira, el miedo y la tristeza y aparecen cuando de repente se activan las heridas emocionales que tenemos. El miedo y la ira pueden conducir a la ansiedad y la tristeza a la depresión.

Esconder este dolor emocional y hacer cómo que no existen estas heridas emocionales no dejarán que puedas tener una vida con bienestar ni disfrutar de los momentos de felicidad y, además, producirán efectos negativos a tu salud.

Existen estudios que demuestran como el sistema endocrino, el sistema nervioso y el sistema inmunitario están relacionados. El sistema nervioso y el endocrino se encargan de mantener el equilibrio natural de nuestro organismo para que todos los sistemas funcionen correctamente. Este mecanismo autorregulador se llama homeostasis.

El sistema nervioso envía órdenes a nuestros sistemas y órganos para indicar qué es lo que tienen que hacer y el sistema endocrino regula las hormonas que se necesitan para que realicen sus funciones.

Respecto al sistema inmunitario defiende al organismo de agentes patógenos como los virus, las bacterias y los hongos, que puedan dañarlo.

Cuando tenemos reacciones emocionales derivadas de este dolor producido por las heridas emocionales nuestro sistema nervioso autónomo simpático se activa y se aumenta la frecuencia cardiaca y la fuerza de las contracciones del músculo cardíaco, aumenta la tensión muscular, se ensanchan las vías respiratorias para que entre más oxígeno, se hacen más lentas la digestión y la micción. Todo ello para prepararnos para la lucha al percibir un peligro. Peligro que realmente no existe, pero nuestro cuerpo sufre como si existiera.

Daños en las salud por ansiedad, estrés, heridas emocionales.

Proceso fisiológico ante las heridas emocionales

Cuando nuestras heridas emocionales son tocadas por alguna vivencia saltan las alertas en nuestro sistema nervioso y se pone a la defensiva. Esto puede suceder ante situaciones en las que aparecen la tristeza, el estrés, la ansiedad o la ira. En esos momentos el corazón se acelera para que llegue más sangre a los músculos, la respiración aumenta su frecuencia y se ralentizan el resto de las funciones del organismo.

Si existe una amenaza real de la que hay que defenderse este proceso es beneficioso porque nos ayuda a defendernos pero si esa amenaza no es real, como es el caso de la reacción emocional, es perjudicial si se mantiene en el tiempo y se repiten con frecuencia.

Cuando esta reacción se repite con frecuencia se produce una sobrecarga de órdenes que el cerebro manda a nuestros órganos para que se preparen para esta defensa que no es necesaria, los órganos están activados de forma constante y ante esta sobreactivación se produce un agotamiento llegando a producir enfermedades.

Las heridas emocionales proceden de la infancia, se mantienen en el tiempo y se reactivan en la vida adulta ante alguna vivencia negativa. Al reactivarse nos producen ansiedad, dolor, miedo, tristeza o estrés. Si no se sanan y perduran aparecerán daños en nuestra salud por esas alteraciones fisiológicas que se producen.

Dolor. Fibromialgia. Heridas emocionales.

¿Qué daños se producen?

El proceso que reactivan las heridas emocionales se desencadena ante el ciclo pensamiento – emoción – comportamiento. Hay una situación que nos lleva a un pensamiento relacionado con esa herida que la mayoría de las veces ni detectamos porque es muy rápido y procede del inconsciente, este pensamiento lleva a una emoción desagradable relacionada con esa herida y al final condiciona nuestro comportamiento de manera descontrolada y automática.

En esta situación se producen una alteración de nuestro equilibrio biológico alterándose el sistema nervioso con las señales de alerta que hacen que se segreguen hormonas como el cortisol y la adrenalina en cantidades superiores a las normales. En consecuencia, se alteran los niveles de hormonas que segrega el sistema endocrino. A la vez, el sistema inmunitario se ve afectado disminuyendo su capacidad de defensa.

Si en poco tiempo esta situación vuelve a la normalidad no pasa nada, el organismo se reequilibra y vuelve a funcionas de forma adecuada. Pero si se mantiene en el tiempo y sobre todo si se cronifica las consecuencias pueden ser:

  • Alteraciones del sueño
  • Alteraciones hormonales que llevan a disfunciones orgánicas
  • Falta de energía
  • Dolores musculares
  • Problemas sexuales
  • Trastornos digestivos
  • Ansiedad crónica
  • Ataques de pánico
  • Estrés crónico
  • Mayor riesgo de sufrir adicciones
  • Aumento del riesgo de enfermedades cardiovasculares
  • Hipertensión
  • Daño renal
  • Daño hepático

Cómo sanar las heridas emocionales

Cómo sanar estas heridas emocionales

El proceso de sanación de las heridas emocionales consta de varias fases y requiere de técnicas específicas. Para empezar en este proceso te hago una relación de los pasos a seguir:

  • Aprende a usar tu respiración para relajarte y poder observar qué sucede dentro de ti.
  • La meditación también es una buena herramienta para ayudarte en tu autoconocimiento.
  • Trabaja cada herida que detectes por separado.
  • Toma conciencia del momento en el que se creó esa herida.
  • Identifica las creencias que hay en torno a esa herida que te limitan.
  • Reconoce los comportamientos automáticos y defensivos que tienes debido a esa herida y que no te benefician.
  • Haz conscientes los miedos que te provoca esa herida y sé consciente de que no existen los peligros externos que te producen ese miedo.
  • Cambia los comportamientos automáticos derivados de esa herida por comportamientos elegidos por ti y que te beneficien.
  • Acepta tus heridas, tu proceso y el tiempo que necesitas para sanarlas sin juzgarte ni castigarte. Respétate y quiérete.
  • Perdona tus errores y los de los demás.
  • Cuídate y lleva una vida saludable.
  • Felicítate por cada paso que des y cada logro que consigas.
  • Saber pedir ayuda y ayudar a otros.
  • Agradecer por las cosas buenas que tienes en la vida.

Estos son consejos generales para tomar consciencia de las acciones que hay que llevar a cabo pero cada persona tiene sus propias vivencias y sus propias heridas que han de ser atendidas de forma personalizada.

Recuerda que las emociones nunca hay que esconderlas o querer olvidar porque no desaparecen. Hay que aprender a gestionar las emociones de manera que cuando aparezcan no nos frenen, no nos roben la energía, no nos paralicen y no nos hagan sufrir.

¿Necesitas ayuda?

Para lograr una sanación total de las heridas emocionales realizando todas las prácticas adecuadas son necesarios los conocimientos específicos y la orientación correcta. Puede que para ello necesites el acompañamiento y guía de un profesional especializado con el que aprender y realizar las técnicas.

En el proceso de desarrollo personal que realizo con mi método CVD se trabaja con la autoestimacreenciasvalores, pensamientos, emociones y comportamientos. Es un trabajo de autoconocimiento y liberación usando las herramientas adecuadas para sanar tus heridas emocionales, fortalecer tus debilidades y lograr aprender lo que necesitas para conseguir la vida que deseas.

Puedes contactar conmigo en www.loretoserrano.com/contacto

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