La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria de la piel que se manifiesta por manchas rojas que con frecuencia tienen pequeñas vesículas que causan un picor severo. No es una enfermedad contagiosa. Su fase aguda evoluciona por brotes de eczemas. Esta fase tiene un gran impacto en la calidad de vida de quien la padece, afectando incluso a la calidad del sueño. El picor es intenso y llega a ser mayor que en la psoriasis.

Causas

Una piel sana conserva la humedad y tiene una protección contra la invasión de microorganismos, irritantes y alérgenos. La piel se puede encontrar afectada en esta capacidad de protección y en la dermatitis atópica tiene sus causas en condiciones genéticas favorables.

Las causas se relacionan con una alteración del sistema inmunitario, que actúa de forma exagerada, dando lugar a una inflamación. La inflamación también puede ser agravada por la entrada de bacterias y alérgenos al estar la piel con sequedad y por lo tanto permeable. Esto puede llevar a una complicación con una sobreinfección bacteriana o viral por herpes o infección por molluscum contagiosum.

 

Dermatitis atópica

Síntomas

Normalmente comienza entre los 2 y 3 meses de vida del bebé en los que aparecen manchas rojas en mejillas y manos, y más tarde en las zonas de los codos y rodillas, en las zonas de las articulaciones. Durante los siguientes 1 a 2 años la enfermedad avanza en forma de brotes. Existe picor si la piel está seca permanentemente, picor que contribuye a la pérdida de sueño y a una menor calidad de vida.

A los dos años algunos niños desarrollan otras manifestaciones con relación a la piel atópica como pueden ser rinitis y/o asma alérgica. Se relaciona con rasguños y una importante invasión de Staphylococcus Aureus en la piel.

En general, en bebés, niños y adultos, se observa una piel escamosa, agrietada y engrosada.

Los más afectados son los bebés y los niños, entre los 3 meses y los 5 años. Y los síntomas pueden persistir hasta la edad adulta.

Hay que tener en cuenta que cuando la piel está muy seca se vuelve más permeable y deja de cumplir su función barrera para proteger de las agresiones externas y los alérgenos, y se produce picor. Pero la piel seca, sin más síntomas, no tiene por qué ser una piel atópica.

Consejos en el día a día para evitar brotes

  • Seguir el consejo de su pediatra o médico especialista.
  • No debe adelantar la diversificación alimentaria en los lactantes.
  • Utilizar ropa de algodón. Evitar la lana y las fibras sintéticas, ya que pueden irritar la piel.
  • Secar bien y planchar la ropa en contacto con la piel, estos serán menos ásperos.
  • Evitar utilizar demasiado detergente para lavar la ropa. El exceso puede debilitar la epidermis.
  • Asegurar que la temperatura de la casa no sea demasiado alta, se aconseja entre 19 y 20 ° C.
  • Humeder regularmente la atmósfera.
  • Ventilar la casa todos los días, no importa si es verano o invierno.
  • Humedecer regularmente las habitaciones o extender durante toda la noche una toalla mojada en la habitación.
  • No restringir la actividad deportiva, a menos que la sudoración excesiva aumente el picor.
  • Evitar los alérgenos que puedan inducir una reacción inflamatoria aguda: ácaros, polen, pelos y plumas de animales,
  • Evitar la exposición al tabaco, es irritante.
  • Se debe evitar el exceso de higiene ya que se elimina la barrera protectora de la piel contra las bacterias patógenas.
  • La ducha o baño debe ser de 5 a 10 minutos con agua a temperatura máxima de 35 grados (la piel seca no soporta el agua caliente).
  • No tomar baños de burbujas ni con sales de baño, son irritantes y secan la piel.
  • Lavar el cuerpo con un producto higiénico de alta tolerancia, idealmente sin jabón. Los jabones normales irritan y secan la piel.
  • Secar la piel cuidadosamente con una toalla de algodón.
  • Usar 1 a 2 veces al día un emoliente de muy alta tolerancia para reconstruir la barrera cutánea y que se restaure la suavidad de la piel y la flexibilidad, reduciendo la hiperreactividad.
  • En el brote, usar 1 a 2 veces al día en la parte exterior de las lesiones de eczema un tratamiento hidratante para calmar el picor y reducir la reacción inflamatoria.
  • El estrés y una carga emocional mal gestionada influye en los brotes por lo que se recomienda llevar una vida saludable y equilibrada.

Tratamiento

No existe, todavía, una tratamiento que cure la dermatitis atópica por lo que se encuentra en continua investigación. Aunque si hay tratamientos y medidas de cuidado personal para evitar los brotes y aliviar los síntomas de esta dermatitis. Tanto en bebés como en adultos.

En bebés, se debe actuar lo antes posible en la etapa de xerosis preatópica en lactantes de riesgo para poder interrumpir su progreso. En estos lactantes se observa piel muy seca, áspera, de color blanquecino, y con antecedentes familiares de piel atópica.

La evolución se para interviniendo rápida y específicamente, evitando los brotes. Cada brote inflamatorio de dermatitis atópica favorece las recaídas, por esto, es importante tratar cada brote de forma radical con el fin de disminuir la reaparición de lesiones y reducir el progreso de la dermatitis.

El tratamiento farmacológico en el brote de eczema es principalmente con corticoides locales que favorecen la desaparición de las lesiones inflamatorias y el alivio rápido del prurito. Siempre bajo prescripción médica. Si el tratamiento con corticoides se retira bruscamente se puede dar una recaída de las lesiones por lo que su retirada debe ser poco a poco. 

Hay otra opción de tratamiento en niños mayores de 1 año en el caso de que los corticoides no hayan dado resultado. Esta opción es el tracrólimus, es un medicamento por lo que debe ser siempre bajo prescripción médica, al igual que el tratamiento con corticoides, y con un seguimiento exhaustivo por parte de su médico especialista.

Cuando esta afección persiste en la etapa adulta, los casos suelen ser graves. Suele tratarse con corticoides tópicos, que han demostrado su utilidad, bien usados, antibióticos. antihistamínicos orales y fototerapias. Vuelvo a recordar que todos estos tratamientos deben ser bajo prescripción médica y con un seguimiento de su efectividad y de la evolución de la dermatitis.

Ante esta situación es importante saber que cada vez hay más opciones para tratar y prevenir los brotes. Además de los consejos a seguir en el día a día expuestos, también desde el uso de productos naturales se puede evitar el uso frecuente de corticoides.

Recomiendo los siguientes productos porque he podido comprobar su efectividad en pacientes a los que se los he recomendado en la farmacia:

Dermaveel está indicado en el abordaje de los síntomas asociados a la dermatitis atópica y otras dermatosis de origen desconocido. Es un tratamiento tópico eficaz y sin corticoides compuesto por ingredientes naturales que reduce la inflamación, protege a las células frente a la deshidratación y produce un efecto estabilizante celular que protege la piel de la penetración de alérgenos. Ayuda a aliviar el prurito y ayuda en la defensa frente a microorganismos. También, mejora la capa lipídica y reduce la pérdida de agua transepidérmica, ya que es una crema de barrera basada en lípidos que contienen ceramida e imita la estructura de la piel. Se puede utilizar en cualquier fase de la dermatitis atópica, de leve a moderada, y se puede aplicar en cualquier parte del cuerpo. Tiene fácil aplicación y rápida absorción; sin conservantes ni colorantes; y sin perfumes ni aceites minerales.

Su uso diario previene en gran parte la aparición de los brotes y en caso de brote llega a evitar en un importante porcentaje el uso de corticoides tópicos. Esta crema la he recomendado en numerosas ocasiones a pacientes con dermatitis atópica y sobre todo en bebés y niños. Os aseguro que en todos estos casos me han venido a decir a la farmacia que estaban muy contentos con la eficacia de Dermaveel y sobre todo por poder dejar de usar corticoides, en bebés y adultos.

También existe un tratamiento simbiótico de la Línea HeelProbiotics que ayuda a mantener la piel saludable. Dermaveel Pro es una mezcla de probióticos específicos que disminuye la sintomatología en los niños con dermatitis atópica.

Lo ideal es el uso de ambos, Dermaveel crema y Dermaveel Pro para combatir y prevenir la dermatitis por dentro y por fuera. Y no tengo ninguna interés con este laboratorio, simplemente es un laboratorio en el que confío por la efectividad y seguridad de sus productos.

Otra gama de productos que también me gusta por el mismo motivo es Multilind de laboratorios Stada. Tienen varios productos para la higiene, hidratación diaria de la piel seca y extraseca, y control de la dermatitis atópica. Contienen sólo ingredientes activos naturales. Se puede usar en adultos, niños y bebés.

Existen más productos en la farmacia especializados en piel atópica, puedes preguntar a tu dermatólogo o farmacéutico especialista.

Estos productos han dado buen resultado en dermatitis atópica entre mis pacientes. Con el uso diario, en la mayoría he podido observar que han disminuido el pico y la irritación y que han disminuido la aparición de brotes. Además, se ha visto fortalecida y protegida la piel aumentando su función de barrera protectora. En los pacientes que eran propensos a tener infecciones en la zona afectada se ha reducido este riesgo de sobreinfecciones. También reduce la aparición de alergias. Su tolerancia y eficacia han sido demostradas clínicamente.

Estos productos están indicados en pieles atópicas, secas y extrasecas, en pieles con eczema y con psoriasis, en pieles sensible y reactivas, y en pieles diabéticas.

Es importante seguir los consejos higiénicos diarios y un tratamiento preventivo para mejorar la calidad de vida de bebés, niños y adultos con dermatitis atópica.

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