Hoy en día todos hemos oído hablar del coaching en distintos entornos, pero ¿qué es realmente ? ¿Cómo nos ayuda el coaching?
El coaching es un proceso que busca contribuir a alcanzar nuestra mejor versión alineada con nuestros valores más profundos. A través de un proceso de coaching se consigue sacar lo mejor de cada persona, tanto en el terreno personal como en el profesional.
La misión del coaching es ayudarnos a tomar el timón de nuestra vida para alcanzar los objetivos que queremos conseguir. Nos hace buscar nuevos caminos para reformular las salidas siendo responsables de nuestro futuro. En el proceso se logra descubrir nuevas perspectivas que hacen que aprovechemos las oportunidades que la vida nos ofrece.
Y además, generamos otras oportunidades nuevas. Así es cómo nos ayuda el coaching. Es un proceso personalizado y confidencial de descubrimiento de uno mismo en el que el coach te acompaña y te guía hacia tus objetivos deseados. En el proceso se trabaja en la gestión de los cambios que se realizan para lograr sacar todo el potencial que tenemos en nuestro interior.
En el proceso de coaching se trabaja con los pensamientos, creencias, valores y emociones liberando aquellos que no te ayudan y potenciando aquello que te hace crecer. Se profundiza en el autoconocimiento mediante la reflexión propia de cada uno y a la vez se potencia la creatividad para encontrar el camino y las acciones que llevan a comprometerse con un plan de acción que uno mismo se marca. Y se define cada paso de ese plan de acción para tener una ruta por la que trabajar.
Es un viaje de transformación hacia los objetivos definidos por cada persona para lograr lo que se ha propuesto.
El cerebro necesita que le digamos a dónde queremos ir porque trabaja basándose en los objetivos que tenemos. Si no le decimos la dirección que tiene que tomar no nos podrá ayudar en nuestro camino. El coaching ayuda a nuestro cerebro en este camino porque contribuye a crear nuevas rutas neuronales dirigidas conseguir un sólido crecimiento personal hacia nuestros objetivos. La creación de estas nuevas rutas se produce gracias a la neuroplasticidad que tiene nuestro cerebro y que el coaching aprovecha para crearlas. A través de ellas se llega al cambio deseado.
Para conseguir un sólido desarrollo personal necesitamos conocernos a nosotros mismos muy bien, conocer nuestras creencias y valores, y como de alineados están con nuestra vida. Necesitamos conocer lo que queremos y lo que no queremos, así como lo que nos queda por aprender. Y sobre todo, necesitamos ser conscientes de lo que nos limita en nuestro camino y de lo que nos potencia.
Una vez se llega a la toma de conciencia de todos estos aspectos de uno mismo podemos identificar nuestros verdaderos objetivos y realizaremos las acciones necesarias para alcanzarlos.
El coach mediante preguntas especialmente formuladas para dar en la diana hará que el cerebro busque respuestas y las encuentre. Es quien lleva de la mano al cliente en este proceso sabiendo cómo guiar en cada momento y que partes tocar para que avance, trabajando distintas áreas de su vida en las que quiere mejorar.
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